¿Cómo se calcula el aguinaldo?
En la medida en que el aguinaldo es el equivalente al pago de 15 días, es necesario conocer cuál es el pago por día. Para ello, es necesario tomar el salario neto mensual y dividirlo entre 30 días; el resultado será el salario diario:
Ejemplo: Para un trabajador que recibe 12,000 pesos de salario neto al mes:
- 12,000 pesos / 30 días = 400 pesos es el salario diario
- 400 pesos de salario diario x 15 días correspondientes de aguinaldo = 6,000 pesos
- El trabajador recibirá 6,000 pesos por concepto de aguinaldo.
Si el trabajador laboró menos de un año:
Es necesario saber, al igual que en la situación del trabajador que laboró el año completo, el dato del salario diario, que se obtiene de la misma forma que en el ejemplo ya presentado. Realizado este cálculo, el resultado debe multiplicarse por 15, y luego dividirle entre 365 días, para después multiplicarle por los días que el trabajador laboró.
Ejemplo: Para un trabajador que recibe 12,000 pesos de salario al neto mes, pero ingresó a su trabajo actual el 1 de junio, trabajó 214 días, entonces:
- 12,000 pesos / 30 días = 400 pesos es el salario diario
- 400 pesos de salario diario x 15 días correspondientes de aguinaldo = 6,000 pesos
- 6,000 pesos se dividen por 365 días = 16.438 pesos
- 16.438 pesos se multiplican por 214 días laborados = 3,517.80 pesos
- El trabajador recibirá 3,517.80 pesos por concepto de aguinaldo tras laborar 214 días.
¿El aguinaldo es libre de impuestos y de descuentos?
El aguinaldo está considerado por la ley laboral vigente como un ingreso para el trabajador, por lo que está sujeto al pago de ISR y será obligatorio para el patrón hacer el cálculo y retener el impuesto correspondiente, con excepción de los casos en los que la gratificación sea inferior al monto equivalente a 30 días de salario mínimo.
Al aguinaldo sólo se le podrán descontar los anticipos a cuenta de dicha remuneración, o por motivo de pensiones alimenticias. Ningún otro descuento está contemplado por la ley laboral.
FUENTE:León A. Martínez , EL ECONOMISTA